Un hombre que se presentaba como arzobispo de una de las iglesias de la llamada 'Santa Muerte' fue detenido junto a ocho personas más acusadas de formar una banda de secuestradores, informó este martes la Procuraduría (fiscalía) de Ciudad de México.
David Romo, quien se presenta ante la prensa como "arzobispo prelado" de la autodenominada Iglesia Tradicional Católica México-Estados Unidos, adoradora de la 'Santa Muerte', fue detenido en un operativo en que se liberó a un matrimonio de ancianos, secuestrado en diciembre.
La fiscalía precisó en un comunicado que "las nueve personas capturadas se hacían pasar como integrantes del grupo delictivo de los Zetas", un sangriento cartel de las drogas integrado por militares desertores que fueron reclutados por el narcotráfico en la década de 1990.
A Romo y a los otros ocho detenidos, incluidas cuatro mujeres, se les acusa de al menos dos secuestros, dos casos de extorsión y "del robo de automóviles, alhajas, dinero en efectivo y documentos", agrega el texto.
Según la fiscalía, parte del dinero que cobró como rescate por la pareja de ancianos fue llevado por Romo al 'santuario nacional del ángel de la Santa Muerte', en una barrio popular de la capital.
A ese templo acuden el primer día de cada mes cientos de fieles a adorar la imagen de la "Santa Muerte": un esqueleto con ropas de mujer, guadaña y capucha.
Las detenciones tuvieron lugar entre el 18 al 19 de diciembre pero sólo este martes fueron presentadas a la prensa.
En 2005 el gobierno había declarado ilegal al grupo que encabezaba Romo, mientras que la Iglesia Católica ha calificado como "sacrílego" el culto a la Santa Muerte, extendido a Estados Unidos y algunos países latinoamericanos.
Ese rito que retoma algunos elementos de la liturgia católica, tiene numerosos adeptos entre las clases populares y grupos de delincuentes.
David Romo, quien se presenta ante la prensa como "arzobispo prelado" de la autodenominada Iglesia Tradicional Católica México-Estados Unidos, adoradora de la 'Santa Muerte', fue detenido en un operativo en que se liberó a un matrimonio de ancianos, secuestrado en diciembre.
La fiscalía precisó en un comunicado que "las nueve personas capturadas se hacían pasar como integrantes del grupo delictivo de los Zetas", un sangriento cartel de las drogas integrado por militares desertores que fueron reclutados por el narcotráfico en la década de 1990.
A Romo y a los otros ocho detenidos, incluidas cuatro mujeres, se les acusa de al menos dos secuestros, dos casos de extorsión y "del robo de automóviles, alhajas, dinero en efectivo y documentos", agrega el texto.
Según la fiscalía, parte del dinero que cobró como rescate por la pareja de ancianos fue llevado por Romo al 'santuario nacional del ángel de la Santa Muerte', en una barrio popular de la capital.
A ese templo acuden el primer día de cada mes cientos de fieles a adorar la imagen de la "Santa Muerte": un esqueleto con ropas de mujer, guadaña y capucha.
Las detenciones tuvieron lugar entre el 18 al 19 de diciembre pero sólo este martes fueron presentadas a la prensa.
En 2005 el gobierno había declarado ilegal al grupo que encabezaba Romo, mientras que la Iglesia Católica ha calificado como "sacrílego" el culto a la Santa Muerte, extendido a Estados Unidos y algunos países latinoamericanos.
Ese rito que retoma algunos elementos de la liturgia católica, tiene numerosos adeptos entre las clases populares y grupos de delincuentes.